Luego de pasar bastante más de la mitad de su historia en el corredor de la muerte, Frank Jarvis Atwood ha sido ejecutado el miércoles por el secuestro y homicidio en 1984 de una niña de Tucsón de 8 años.
Frank de 66 años ha sido proclamado muerto a las 10:16 a.m., 12 min luego de que le inyectaran una dosis letal del sedante pentobarbital en la prisión estatal de Florence. Atwood ha sido el segundo sentenciado a muerte en fallecer por inyección letal en Arizona a partir de que el estado reanudó la utilización de la pena capital el mes pasado luego de una pausa que duró casi 8 años.
La última ejecución de Arizona previo a aquello se produjo el 23 de julio de 2014, una vez que el doble asesino sentenciado Joseph Wood tardó casi 2 horas en fallecer luego de recibir 15 dosis de una mezcla de 2 medicamentos que el estado por el momento no usa. A Atwood se le otorgó la alternativa de fallecer en la cámara de gas de Arizona, que ha sido renovada en 2020.
Atwood era el duodécimo hombre más viejo entre los 109 hombres y 3 damas que en la actualidad combaten sentencias de muerte en Arizona. Solo 2 presos recientes estuvieron en el corredor de el deceso más tiempo que Atwood, según Judy Keane, portavoz del Departamento de Correcciones, Rehabilitación y Reingreso de Arizona. Al principio estuvo recluido en la Unidad Central de la prisión estatal de Florence, que albergaba el corredor de el deceso de Arizona en el instante de su sentencia.
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